Hay ruido allá afuera
tal vez no sea nada
solo la vida.
martes, 5 de abril de 2016
Uno, inevitablemente, va perdiendo los sueños. Los va postergando, dejando que pasen los días hasta que se van adormeciendo. Un día llega alguien y los despierta, los expone ante ti y te muestra cuán nuevos y conocidos te son tus propios sueños.