viernes, 14 de noviembre de 2008

Descubrimiento

He descubierto mi orfandad,
falta compañía para andar
el sendero que me toca,
desnudez con que vine
a procurarme el pan y el llanto.
He descubierto me estafan
( sigo siendo una semilla
en el vientre de mi madre)
nadie ansia que yo vuelva en las tardes,
ni me esperan tras la puerta del ultimo día.
He encontrado,
debajo de mi sombra,
la tristeza del hombre ausente,
su grito apagado,
y sobre todo,
la estrechez del camino que me conduce a Dios.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Buen poema, de verdad, me maravilla que consigas escribir así en un idioma que no es el tuyo materno.

Un besazo.

Flávia Garcez dijo...

Que posso dizer?
Um dos poemas mais belos que já li em minha vida, que me inspirou profundamente.